Estábamos en el noveno piso del edificio. Y tenían que venir a recoger un paquete de una tienda online.
Una devolución.
Era un paquete grande. No algo excesivo pero si algo pesado.
Así que habría que bajarlo en el ascensor.
Vino a recogerlo el repartidor de una empresa de mensajería de la que no puedo decir el nombre.
Bueno, si lo voy a decir.
Que sepan los trabajadores que tienen y por qué no es una de las mensajerías que recomiendo en el módulo 3 de Ai Business Master.
Era de SEUR.
El paquete tenía una posición en la que entraba perfectamente en el ascensor. En el resto de posiciones, no entraba.
Se veía claro cómo meterlo. Pero al parecer este repartidor estaba borracho.
Probaba todo tipo de posiciones menos la correcta. Desesperándose cada vez más, hasta adoptar una posición más propia de un simio. Y empezar a dar golpes al paquete.
Hasta que al final tuve que sujetarle, claro.
Y meter yo el paquete en el ascensor.
Era como un mono borracho.
Y en homenaje a ese repartidor, es este blog de IA. Que es lo que parecía tener aquel tipo: una inteligencia artificial.
Bien.
Esto es exactamente lo que le pasa a mucha gente cuando quiere empezar un negocio online.
Se creen que pueden hacerlo de cualquier forma.
No ven que hay cosas que no funcionan.
Y se empeñan en seguir intentando que funcione.
Tratando de encajar las piezas de manera incorrecta.
Desesperándose cada vez más.
Dando tumbos.
Por su cuenta o pasando de un curso a otro.
Pagando por piezas sueltas que luego no pueden encajar.
Como un mono borracho.
Para la gente que quiere aprovechar la IA, pero tiene cerebro propio,
tengo un curso para aprender a encajar todas esas piezas.
Y así, no desesperarse con sus negocios online:
Ai BUSINESS MASTER
Aunque estén borrachos.
